A lo largo de los años, los casos de fraude por robo de identidad han experimentado un aumento significativo en LATAM. La digitalización de servicios y el uso masivo de internet han facilitado nuevas formas para que los delincuentes se salgan con la suya. Estos han perfeccionado sus métodos, empleando técnicas más sofisticadas para suplantar la identidad de las personas. Como consecuencia, las víctimas enfrentan graves repercusiones financieras y legales, mientras que los criminales aprovechan, y encuentran nuevas maneras de lucrar con la vulnerabilidad tecnológica y la falta de educación digital.
América Latina experimentó un incremento del 52% en el fraude de identidad sintética en 2023.
A lo largo de mi carrera como especialista en tecnología y hoy en día como Regional Sales Director South América en NAAT.TECH, he enfocado mi experiencia en proteger a empresas del fraude por robo de identidad, enfrentándome a sesgos que subestiman la importancia de la tecnología para prevenir estos riesgos. Aunque todos los procesos son esenciales, aquellos relacionados con el cierre de acuerdos y la gestión de información sensible requieren una mayor inversión en protección avanzada. La falta de conciencia y preparación tecnológica puede dejar a las empresas vulnerables, con consecuencias potencialmente devastadoras.
Fraudes en ascenso: Casos de robo de identidad que amenazan la seguridad
Recientemente, realicé una investigación sobre varios casos de fraude en Latinoamérica, un tema que considero de gran relevancia para nuestro contexto actual. Me gustaría aprovechar este espacio para compartir con ustedes algunos de los hallazgos más interesantes y preocupantes, ya que estoy convencido de que comprender estos escenarios puede ayudarnos a fortalecer nuestras estrategias de prevención y protección dentro de cualquier industria.
Caso 1: Un hombre fue arrestado en Salvador por intentar cometer fraude, haciéndose pasar por el actor Chay Suede. Utilizó los datos personales del actor, incluyendo una selfie, para abrir una cuenta bancaria a través de una aplicación. Logró obtener un límite de crédito de casi R$ 200.000 y un crédito especial de R$ 25.000. Su detención se produjo cuando no pudo deletrear el nombre completo del actor.
Caso 2: La Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) ha tomado una drástica medida contra el delantero Alexander Bolaños, actualmente jugador de Independiente del Valle y con un breve paso por Colo Colo. Bolaños ha sido suspendido por tres años de toda actividad relacionada con el fútbol, tras descubrirse que falsificó documentos y suplantó identidades para obtener ventajas deportivas.
Caso 3: El abogado Rafael Abascal relató en TikTok cómo fue víctima de un fraude en el que le robaron su identidad para adquirir un auto valuado en más de un millón de pesos mexicanos. A pesar de su experiencia legal, se enteró del delito cuando su banco le notificó sobre un pago pendiente de 19 mil pesos, correspondiente a un crédito automotriz que nunca solicitó. Tras investigar, descubrió que los estafadores accedieron a su información personal, probablemente facilitada por los agentes de ventas, lo que dejó en evidencia su vulnerabilidad ante este tipo de fraudes.
Tecnología biométrica para evitar el robo de identidad en América Latina
En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, me he destacado como una figura clave en el desarrollo de negocios importantes en América Latina.
El robo de identidad en Colombia aumenta en el sector financiero
La constante evolución tecnológica está revolucionando la banca, ofreciendo métodos más innovadores. Sin embargo, esta innovación abre brechas para el robo de identidad de formas inéditas.
Caso 4: La Policía Metropolitana de Bogotá arrestó a un hombre que intentó suplantar a otra persona para retirar una gran suma de dinero en un banco de Puente Aranda. El individuo utilizó huellas de plástico para engañar a los empleados, pero al comparar sus huellas dactilares, algunas coincidían y otras no con la identidad que proporcionó. Esto llevó a una revisión física, donde se descubrió que usaba un polímero o cinta especial en sus dedos para replicar las huellas de otro ciudadano.
Caso 5: Un estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) fue descubierto intentando suplantar la identidad de uno de sus compañeros durante un examen. El joven se presentó en una de las aulas de la institución para realizar la prueba, mostrando varias identificaciones que pertenecían a otro alumno. Ante esta situación, la UNAM solicitó el apoyo de las autoridades de la Ciudad de México para investigar y tomar las medidas correspondientes.
Recomendaciones para prevenir el robo de identidad
La suplantación de identidad no es una amenaza futura; es una realidad urgente que ya está afectando a individuos y empresas en toda América Latina. Los delincuentes están utilizando métodos cada vez más sofisticados, desde la falsificación de documentos hasta la manipulación de huellas dactilares, poniendo en riesgo lo más valioso que tenemos: nuestra identidad.
Es imprescindible tomar acción inmediata. Tanto personas como organizaciones deben ser conscientes de estos riesgos y protegerse de manera integral. No basta con utilizar contraseñas seguras; es necesario adoptar herramientas avanzadas que minimicen el riesgo de suplantación en todos los aspectos de la vida. En este esfuerzo, la tecnología es una aliada fundamental. No debemos escatimar en la adopción de soluciones que refuercen la seguridad al acceder a productos y servicios. Entre las tecnologías más efectivas destacan las biométricas, como el reconocimiento facial, la lectura avanzada de huellas dactilares, el escaneo de iris y el análisis de voz. Sin embargo, su implementación debe realizarse de forma meticulosa, respaldada por plataformas robustas que garanticen su correcto funcionamiento.
El reconocimiento facial, por ejemplo, ya se utiliza en sectores como la banca y las aerolíneas para verificar la identidad de los usuarios, mientras que la autenticación mediante huellas dactilares es común en dispositivos móviles. Pero es crucial ir más allá, aplicando estas tecnologías de manera generalizada en múltiples sectores para prevenir fraudes y ataques futuros. La clave radica en no depender de un solo método, sino en combinar varias soluciones biométricas para crear capas adicionales de seguridad.
Proteger nuestra identidad es una responsabilidad compartida. Es el momento de actuar y prevenir, antes de enfrentar las devastadoras consecuencias de un robo de identidad, tanto a nivel personal como empresarial.